
—¿A cuál de los dos quieren ustedes que les ponga en libertad?
Ellos dijeron:
—¡A Barrabás! >>
Pilato no podía hallar alguna falta en el Señor Jesús. Para dejarlo libre se le ocurrió la idea de poner a Jesús y a un temible ladrón, asesino y tramposo llamado Barrabás para que el pueblo decidiera liberar a uno de los dos. Lo más lógico era que pusieran en libertad a Jesús pues era inocente. sin embargo la sorpresa de Pilato fue que el pueblo decidió liberar a Barrabás en lugar de Jesús.
La verdad es que muy a menudo hacemos exactamente lo mismo que este pueblo. Con nuestras acciones y decisiones escogemos a Barrabás y traicionamos a nuestro Señor. Cuando preferimos algo que no es Cristo escogemos a Barrabás. Debemos cuidar de no caer en el error de decir "Bendito el Hijo de David" y a la vuelta de la esquina "¡Crucifícalo!"
No podemos darnos cuenta de la magnitud de problemas que vienen cuando escogemos a Barrabás. Mateo 27:25 <<Que su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos! —contestó todo el pueblo. >> Al escoger a Barrabás afectamos la vida de nuestra familia y la de nuestra descendencia sin darnos cuenta.
Algunos puntos que podemos sacar de la historia.
1- Todos somos Barrabás. Jesús tomó el lugar de Barrabás en la Cruz, así mismo Jesús murió por ti y por mi tomando el lugar que nos correspondía.
2- Las personas cambian, solamente debemos depositar completamente nuestra confianza en Dios. El pueblo le falló a Jesús; un día lo exaltaba y al siguiente lo abucheaba.
3- ¿Cuánto tiempo llevas en el cristianismo y tu vida no ha tenido ningún cambio? Judas, Herodes y Pilato tuvieron la oportunidad de conocer a Jesús el modelo perfecto de vida y no se convirtieron.
Autor: Pastor Mario Enrique García
Escrito y resumido por: Derek Guzmán
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